El queso puede llegar a evocar pasión, elegancia, deseo e incluso es capaz de liberar tu lado más romántico, o todo lo contrario.
Puedes sorprender a tu pareja con una cena romántica, en la que cada detalle esté cuidado al milímetro, en la que cada queso perfectamente cortado esté asignado a un lugar específico del plato según su intensidad, en la que se disfrute del queso de la forma más sutil y elegante posible…
O por el contrario, te haces LOS macarrones, repito, LOS (no unos cualquiera) y le echas todo el queso que sea posible por encima, aparte de preparar TU salsa con queso (claro está) para darte EL festín de tu vida, que cuando vayas a llevarte los macarrones a la boca estén rebosando de queso fundido, ese que crea hilos desde el plato hasta el tenedor… vamos, que no hay término para expresar ese placer.
El queso es una delicia para el paladar que enamora y cada persona tiene su propia definición para el amor.
Recuerde sacar los quesos del refrigerador al menos una hora antes de servirlos para que estos puedan expresar todos sus matices.
Acompáñalos con panes tradicionales y vinos según tus preferencias.
Comienza con un queso láctico y si es de cabra mucho mejor. Sube gradualmente de maduración, y por tanto de intensidad en sabores, siempre terminando con los quesos azules.
El queso artesano prefiere un soporte natural, y tiene muchas opciones para elegir: mármol, pizarra, madera.
Una tabla de queso es alegría, es salud, es un delicioso bocado del territorio del que proviene… A la hora de crear tu tabla de queso libera tu imaginación y disfruta como lo hace un pintor con su obra maestra. Juega con colores y formas, adórnalo con flores y frutas, haz que tu tabla se vea hermosa y apetitosa.
Recuerda que en nuestra tienda puedes disfrutar de una tabla de los mejores quesos artesanos y si lo deseas puedes reservar una cata de nuestros productos.
¡Te esperamos en Picnik! (Calle Vendeja 11 – Soho, Málaga).